Tenemos 3 cerebros en nuestro cuerpo aunque solo le demos importancia a uno, así es, escuchaste bien. ¡Tenemos tres cerebros! Bueno, más o menos… tres sistemas de inteligencia en nuestro cuerpo, donde se han encontrado neuronas y que se encargan de procesar información de maneras diferentes. ¡Y hoy te voy a enseñar a utilizarlos para tomar decisiones con respecto a tu comida.
El Cerebro en la Cabeza
«Empecemos con el cerebro que todos conocemos: el cerebro de la cabeza. Este es el que usa el pensamiento lógico, el análisis y la razón. Es el que nos ayuda a hacer planes y tomar decisiones calculadas.»
Este cerebro por si mismo, es el que decide comer chocolate, picar algo a deshora o comer dulces cuando estás nervioso, pero…. realmente es eso lo que quiere tu cuerpo?
El Cerebro del Corazón, que el corazón tiene cerebro es una metáfora, ¿no?
No. Se ha descubierto que el corazón contiene un sistema nervioso independiente y bien desarrollado con más de 40.000 neuronas. Gracias a esos circuitos tan elaborados, parece que el corazón puede tomar decisiones y pasar a la acción independientemente del cerebro.
El corazón envía más información al cerebro de la que recibe, es el único órgano del cuerpo con esa propiedad, y puede inhibir o activar determinadas partes del cerebro según las circunstancias, alguien ya ha tomado malas decisiones en el amor, por aquí?
¿Y cómo podemos utilizar este cerebro de un modo sano?
Cultive el silencio, contacte con la naturaleza, viva periodos de soledad, medite, contemple, cuide su entorno vibratorio, trabaje en grupo, viva con sencillez, si no quieres volver a caer en las mismas relaciones de mierda de siempre.
El Cerebro del Intestino
El tercer cerebro, uno menos conocido, pero muy poderoso: el cerebro del intestino, los científicos ya han encontrado neuronas en el intestino entre 80 millones y 100 millones, de hecho dicen que equivale al cerebro de un gato.
Este es el cerebro de la intuición, el que simplemente ‘sabe’ sin tener que pensar mucho. Es ese ‘sexto sentido’ que a veces te dice que algo está bien o mal, aunque no puedas explicarlo.» las antiguas tradiciones lo llamaban el Hara
Este cerebro es el que te propongo para nuestro experimento de hoy, es tan fácil … sencillamente te propongo que te dirijas a la despensa, o al frigorífico, donde halla comida y escoges unos cuantos alimentos, bebidas, los que quieras y los coloques delante de la tripa y observes cuando esa parte del cuerpo se retira para atrás o se acerca.
Esto te va a ayudar a reconectar con tu intuición, en primer lugar, y ha discernir entre antojos y necesidades del organismo, muchas veces tenemos ganas de un alimento específico que no es común en nuestra dieta, y esto sucede porque es nuestro organismo el que nos lo está pidiendo porque necesita cierto nutriente.
Puedes hacer lo mismo con la ropa, te vas a dar cuenta como prefiere las fibras naturales y no quiere los tintes, no pongas las prendas en el corazónporque el corazón lo tenemos muy desentrenado y va a querer ponerse lo de siempre.
En realidad lo que yo os quiero enseñar en este blog, es a tomar menos decisiones con la mente, y desarrollar vuestra intuición que es la que verdaderamente sabe o nos puede decir lo que es bueno para nosotros.
«Así que ya lo sabes: tienes tres cerebros y cada uno tiene algo que decir. La cabeza te da lógica, el corazón te da emoción, y el intestino te da intuición.
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Beatriz Gomáriz para Busco un Cambio